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Se abre el telón

Publicado: diciembre 22, 2012 en REFLEXIONES

17.12.2012 ·  · (Chile)

Toma una cabeza hecha con papel y cartón y la presenta: “Ésta es Lucila, la protagonista”. El pegamento, que va uniendo las capas de papel de periódico hasta dar con la forma perfecta, ya se ha secado. Ahora sólo le queda pintarla con colores y retocar las zonas rugosas con una lija. Toma una de las muchas cabezas que descansan sobre la mesa del taller, esperando a secarse, y se la coloca en la mano derecha. La mueve un poco y comprueba que el mecanismo de la boca funciona correctamente. El títere está listo para la función.

“Lucila, la protagonista”, continúa explicando Bárbara mientras retoca el resto de cabezas que tiene sobre la mesa, “es una niña a la que le gusta mucho leer a Gabriela Mistral”. La vida de la poetisa chilena Lucila Godoy Alcayaga, más conocida por su pseudónimo Gabriela Mistral, es el centro de una de las funciones que Bárbara y su pareja, Papo, llevan a zonas rurales del interior del país, donde la cultura y la educación son de difícil acceso. “La niña se llama igual que Gabriela, por eso le gusta tanto leer sus libros”, cuenta mientras limpia y arregla los títeres de la obra.

Bárbara Salinas, geóloga de formación y titiritera de profesión, decidió con 24 años dejar su puesto de oficina para dedicarse a llevar títeres y educación a aquellos que no tienen tantas posibilidades de acceder al mundo de la cultura por vivir en zonas aisladas del país. Y desde entonces, mueve a sus muñecos en el escenario para llevar mensajes importantes a los más pequeños. Por ejemplo, ‘Caperucita basurita’, una de sus obras, convierte al tradicional cuento de la caperuza roja en una fábula para que los niños aprendan a respetar el medioambiente. “Están tan acostumbrados a la televisión”, asegura, “que cuando los títeres les hablan, se quedan con la boca abierta. Les encantan”.

Y volviendo a la cabeza de cartón que tiene entre las manos, retoma la historia de la próxima función: “Mientras lee, Lucila habla sobre la vida de Gabriela Mistral; la oficial, la otra todavía no la hacemos pública”, aclara. “Y los personajes van apareciendo detrás de ella, como en un sueño”. Deja la cabeza de Lucila en la mesa y presenta al resto de los personajes: “Ésta es Gabriela de joven; y ésta, de mayor. Éste es su supuesto gran amor, según la historia oficial; según la no oficial su verdadero amor sería ella”, explica señalando hacia otra de las cabezas a medio hacer, “una secretaria que la acompañaba a todas partes”. Entre los títeres de la obra también están Pablo Neruda, alumno de la poetisa, y las autoridades suecas que le hicieron entrega del Premio Nobel de Literatura, convirtiéndola en la primera persona de América Latina en recibirlo.

Y así, de la mano de Bárbara y Papo, la historia de Gabriela Mistral, contada por títeres hechos con material reciclado, va llegando a las localidades más apartadas de la comuna de Monte Patria, en la región de Coquimbo. “Gabriela Mistral nació en un pueblo de esta región y fue profesora en un valle muy parecido a éste. Además, era una libre pensadora, y una luchadora, bien revolucionaria para su tiempo. Por eso elegimos hablar sobre su vida”, explica.

Con esta misma historia, la de la niña Lucila que devora libros de Gabriela Mistral y nos habla sobre la vida de la famosa escritora, Bárbara dio sus primeros pasos como titiritera. Y hoy, siete años después, en una localidad del interior de la región de Coquimbo, muy cerca de la cordillera de Los Andes, Bárbara prepara de nuevo la función, junto a su pareja y con títeres nuevos que ellos mismos han fabricado.

Una vez que los muñecos y el escenario están preparados, llega la hora de ensayar. Y para eso cuentan con un público incondicional: sus hijos, de 4 y 2 años. Cada uno asiste a la función como si fuera la primera vez. Aplauden, se ríen, y hablan con los títeres como los demás niños. No importa que ya se sepan los diálogos de memoria porque, en realidad, ninguna función es igual a otra. “Tienes que estar dispuesta a cambiar todo el diálogo, según la conversación que los niños mantengan con los títeres”, explica Bárbara.

Y ahora sí. Ya está todo listo para levantar el telón. Así que Bárbara y Papo se visten de negro, agarran una maleta llena de títeres y recorren el valle hasta llegar a las zonas más aisladas, donde es difícil encontrar funciones de teatro o libros de Gabriela Mistral. Pero, “mientras tiene luz el mundo”, como rezan los versos de la poetisa chilena, Bárbara y Papo siguen a cuestas con su maleta, acercando la cultura a los lugares más recónditos del país. Precisamente para eso: para que tenga luz el mundo.

http://periodismohumano.com/culturas/se-abrio-el-telon.html

De aquellos polvos vienen estos lodos

Publicado: diciembre 6, 2012 en REFLEXIONES
Colectivo Novecento

En estos tiempos en los que cada día hay que movilizarse por distintas causas, en los que la urgencia y la emergencia marcan la agenda política, me parece necesario parar y mirar atrás para entender de qué polvos nos vienen estos lodos.

Todas y cada una de las crisis (financiera, económica y social) que estamos viviendo actualmente son procesos que están vinculados unos con otros, porque suceden simultáneamente en los distintos niveles de un mismo edificio, ese al que los antiguos griegos llamaron “Oikos” y nosotros llamamos la Biosfera . Así, aunque puedan trazarse causas inmediatas para algunas de estas crisis (la crisis financiera tiene que ver con el volumen de la deuda, la crisis económica con la exposición a la misma del sistema productivo, la social con las estrategias de los grupos dominantes dada la organización social existente) todas remiten en última instancia a un mismo origen; y es que nuestra forma de habitar este edificio no se ajusta a las condiciones de uso del mismo.

La Biosfera es el medio en el que se desarrolla la vida en nuestro planeta, un sistema cerrado que funciona gracias a la energía que recibe del sol. Esta aportación de energía más o menos constante es suficiente para que re-cicle todos los materiales que la componen y que hacen posible la vida. Así, solamente con el aporte solar, la Biosfera ha sido durante miles de años capaz de proveer sustento material para las distintas poblaciones de seres vivos de la cadena trófica (incluidos los humanos de las sociedades preindustriales) siempre que no superasen el límite de sustentabilidad de su ecosistema. Nuestra economía, un subsistema más dentro de la Biosfera, está sometida a las mismas leyes físicas que rigen el sistema en el que se inserta.

Todos los subsistemas (ecosistemas) que componen la Biosfera se regeneran constantemente ganando en complejidad y madurez. Se hacen más resilientes. Mejoran. Todos menos el subsistema de la economía humana que, sobre todo en los últimos doscientos años, parece empeñado en crecer hasta atrofiarse devorando al resto de sistemas que lo sostienen y minando sus posibilidades de regeneración. Poniéndole imaginación sería algo así como si los habitantes de la última planta del edificio utilizasen la madera de la estructura que les soporta para construir sucesivas plantas con mejores vistas

Ya en el año 1972 el Informe sobre los límites del crecimiento Informe Meadows, encargado por el Club de Roma, dejó claro que no puede haber un crecimiento poblacional, económico e industrial ilimitado en un planeta de recursos limitados”. El crecimiento económico mundial se basaba en el uso creciente de un stock finito de energía fósil (carbón, petróleo, gas). Mantener tasas de crecimiento como las alcanzadas después de la II Guerra Mundial no era esperable ni deseable puesto que nos llevaría directos al colapso.

Pese al llamamiento expresado en el Informe Meadows, el mundo se entregó al desarrollo de un proceso de desregulación comercial y financiera conocido por el nombre de globalización. Este proceso fue promovido en muchos lugares del planeta por gobiernos e instituciones de corte neoliberal. También gobiernos “socialistas” y socialdemócratas apostaron por la globalización queriendo ver en ella un proceso que mantuviese la ilusión en el progreso generalizado (la piedra angular de su imaginario) y que era la única manera de crear empleo sin tener que intervenir en el conflicto distributivo entre capital y trabajo. La globalización ha permitido crecimientos económicos intermitentes y desiguales gracias a una economía especulativa (también llamada de casino ) que mueve enormes sumas de una punta a otra del globo sin otro criterio que la cambiante rentabilidad a corto plazo.

Hoy ya sabemos que el cenit de la función exponencial de extracción de petróleo se alcanzó en el año 2005; el del gas se alcanzará, más pronto o más tarde dentro de los próximos 30 años. Las tres décadas pasadas serán recordadas como el periodo en el que la humanidad, pese a tener la capacidad para conocer la escasez creciente de energía y materiales a la que se enfrentaba, utilizó todo tipo inventos financieros para mantener e incrementar el consumo y la tasa de extracción de energía y materiales por el viejo mecanismo del endeudamiento. En estos 30 años de ilusionismos e ilusionistas hemos profundizado en la insostenibilidad se nuestro modo de vida de forma irreversible como demuestra el hecho de que las previsiones realizadas por aquel informe vienen cumpliéndose al dedillo . Nos encontramos a las puertas de lo que Richard Heinberg ha denominado “Peak Everything” o la gran escasez .

Pocos de los agentes económicos que cada día toman decisiones tienen en cuenta las implicaciones de que nuestro sistema económico, y por ende nuestra sociedad, sean subsistemas dentro de la Biosfera. Esto es así porque los distintos enfoques económicos elaborados al calor de la sociedad industrial desde el liberalismo al marxismo han sido “históricamente autistas” a esta realidad. Sólo las corrientes que asuman las leyes físicas que rigen el sistema al que pertenecemos serán de utilidad para un futuro post-industrial.

La primera implicación que se desprende de lo dicho más arriba es que siendo la biosfera un sistema cerrado, los recursos materiales de los que nuestra economía puede apropiarse, bien sean en forma de stocks o de flujos, son finitos. Partiendo de un sistema financiero dado a la especulación con los recursos, que para pagar sus deudas necesita de un crecimiento económico sostenido; y con un entramado socioeconómico que, como ilustra el caso de España , es (incluso sin crecimiento) totalmente dependiente de un suministro estable (en cantidad y precio) de ciertos recursos materiales escasos, tenemos puestas las bases para crisis financieras recurrentes.

En España el crédito, atraído de manera especialmente agresiva en las dos últimas décadas, fue destinado a alimentar las distintas burbujas (agua y suelo, alimentos, construcción). Los devastadores efectos de este proceso sobre el sistema productivo español quedaron reflejados en el Informe Petras de 1996, que ya entonces dejaba claro que las nuevas condiciones laborales impedirían a toda una generación de españoles llegar a alcanzar el bienestar experimentado por sus padres. Aparentemente (o, mejor dicho patrimonialmente) somos mucho más ricos de lo que éramos en 1972; pero en realidad emular a nuestros progenitores nos ha llevado a ser infinitamente más pobres.

Nuestra percepción de la realidad como sociedad hubiese sido distinta si hubiésemos integrado en nuestra toma de decisiones información sobre cómo se estaban socavando nuestros capitales físico y social. Es claro que individualmente no todos los españoles han tenido la misma responsabilidad en este proceso; primero porque el endeudamiento de las empresas supera al de las familias en varias veces ; y segundo porque no todas las familias españolas se endeudaron, ni lo hicieron al mismo nivel, ni para los mismos propósitos . De cualquier manera el resultado es que, como sociedad, tenemos una deuda que no podemos pagar. El crédito abundante y barato, considerado como un maná de los mercados, se ha convertido de la noche a la mañana en una trampa. Ahora supone un mecanismo de exclusión que ahonda la brecha entre países, y también dentro de ellos, a base de fagocitar a los sistemas productivo (trabajo remunerado) y reproductivo (servicios públicos y cuidados en general).

Hasta el momento solo han triunfado las huidas hacia adelante. Se ha fallado proponiendo y materializando una alternativa viable frente al paradigma dominante. Hoy hay menos energía disponible y son menos los que disponen de los medios para apropiársela (no es casualidad que el MITpariese el Informe Meadows y que sus patronos se encuentren hoy en mejor posición que nosotros). A los que vamos en el vagón de cola no nos queda otra que decrecer, porque menos energía disponible significa menor capacidad para crear riqueza. Podemos intentar encauzar este proceso reproduciendo en el diseño de nuestros sistemas productivos el funcionamiento circular de la Biosfera. Para ello existen limitaciones físicas, ya que este funcionamiento necesita de un flujo de energía que, esta vez sí, tendrá que ser de origen renovable.

Para conocer las limitaciones del sistema ecológico en el que estamos insertos debemos integrar distintas formas de medir y valorar. No basta con hacer números en unidades monetarias . Conocidas las disponibilidades del sistema, podemos adaptar a las mismas nuestra escala y forma de gestión y nuestra planificación a medio y largo plazo.

Desde el punto de vista de los valores es necesario que anteponer los intereses del sistema al que pertenecemos a nuestros intereses como individuos y como especie. Esta máxima se verifica a lo largo de la jerarquía de funciones de la cadena trófica. Así, pese a que depredadores como los lobos se mueven aparentemente por interés propio, cumplen una función sistémica fundamental que es la de pastorear a los herbívoros y evitar un sobrepastoreo de los espacios que daría al traste con toda la cadena (colapso).

Esto no implica necesariamente relacionarnos con “la naturaleza” como si fuese algo sagrado que hay que tratar de forma reverencial (al fin y al cabo somos parte de ella). Basta con que los sistemas económicos humanos imiten esas mismas funciones de forma que su explotación del medio redunde en una mejora del sistema.

Para ello no se puede perder de vista que es la biodiversidad del suelo la base que soporta la cadena trófica. Por lo tanto la función principal de cualquier economía que pretenda sostenerse es proteger y regenerar el suelo fértil, tal y como hacen los árboles en un bosque. Citando a AlfredSchütz “es necesario que antepongamos los intereses sistémicos a los intereses individuales, sin que ello frene el estímulo que los intereses particulares imprimen al cambio y mejora de los sistemas vivos”.

http://colectivonovecento.org/2012/12/05/de-aquellos-polvos-vienen-estos-lodos/

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.

http://www.rebelion.org/noticia.php?id=160311&titular=de-aquellos-polvos-vienen-estos-lodos-

China, S.A.

Publicado: noviembre 5, 2012 en REFLEXIONES

¿Qué modelo de país se está construyendo?

01.11.2012 ·
Viajamos por China justo antes de que se celebre el XVIII Congreso Nacional de Partido Comunista en el que los dirigentes tendrán que decidir si frenar el ingreso del capital privado dentro del propio Estado.
Mientras, hace apenas unas semanas, 10.000 policías reprimieron brutalmente una protesta de trabajadores industriales por la decisión de Apple de dejar de ensamblar el Iphone en este páis por «políticas fiscales poco favorables» y una mano de obra cada vez más cara.

(Ng Han Guan/ AP Photo)

Estamos en una sala de la elitista Universidad de Estudios Políticos. Durante las últimas décadas, esta ilustre institución ha servido como semillero de peces gordos del partido. Un estudiante pequeño y frágil de movimientos erráticos, tez blanquecina y peinado a lo Hitler nos habla mucho del glorioso pasado de la universidad, y aún más del futuro invencible de China. Tiene diecinueve años. Aunque da la sensación de estar completamente perdido –tanto en el tiempo y el espacio como en la traducción-, sus convicciones son férreas.

La aterradora seriedad del estudiante, sumada a la imagen de sus compañeros exhaustos frente a la pantalla del ordenador en la biblioteca de la universidad, es un fascinante contraste a lo que se ve en las calles del centro de Pekín. En la última década, se han convertido en un campo de batalla para los arquitectos especializados en rascacielos, centros comerciales de lujo y otros templos de la comunicación robotizada. En China ir de compras se ha convertido en una necesidad básica. Tanto para la población local como para los visitantes resulta prácticamente obligatorio.
Pero, ¿qué pasó con el comunismo?

Quizás deberíamos simplemente llamarlo de otra manera: capitalismo comunista global, por ejemplo. Sea lo que sea, deberíamos por lo menos denominarlo correctamente: al fin y al cabo, parece ser lo que guarda el futuro para todos nosotros. Aquí y ahora. O, parafraseando el eslogan oficial de Shanghai, capital comercial del mundo: El futuro empieza ahora.

La dictadura preferida
Pregunto a Li Jiahua, vicedecano de la universidad, cómo su institución, escuela de la línea dura del Partido Comunista de China, se las había arreglado para adaptarse al cambio socioeconómico radical de los últimos veinte años. “Simplemente nos dejamos llevar. Desde luego hemos tenido que hacer frente a innumerables retos. El creciente progreso de nuestro país dio lugar a muchas preguntas. Así que inauguramos programas de economía y gestión financiera, aunque el grueso de nuestro currículum aún consiste en estudios sociales y políticos. Nos dimos cuenta de que nuestra tecnología estaba anticuada. Teníamos que resolver muchas cuestiones sobre la marcha. Pero me gustaría recalcar que la educación moral es aún el núcleo de nuestra institución”.

Estudiantes de la Universidad Tsinghua prueban una nueva plataforma on line. (AP Photo)

En los últimos veinte años, el perfil de los estudiantes de este nido ideológico también ha cambiado mucho. Lo que antes era alguien sumiso a la línea del partido con devoción por los uniformes militares, es ahora un consumidor digital totalmente subordinado a su dictadura preferida. Las camisas militares han dejado lugar a prendas de diseño, o por lo menos a los “falsos originales” de las marcas más prestigiosas del mundo. La agria cara del guarda rojo ha sido reemplazada por una sonrisa perfecta. ¡Ama más! es el eslogan de una de las marcas europeas de automóviles  que más se escucha últimamente por Pekín. Puede que esa bestia llamada China haya estado dormida durante siglos, pero se está convirtiendo en la fantasía de todo gurú del mercado libre.

La mejor forma de describir el ambiente en Pekín es evocando algún clásico futurista. Piensa en Blade Runner mezclado con Minority Report. Multitudes de jóvenes corren por las calles, siempre con prisa. Es de esperar. Mientras crecen, el tiempo en China pasa más rápido que en cualquier otro lugar del mundo. A medida que te abres paso entre las multitudes, en seguida aprendes la única regla que sigue regulando los flujos de peatones en Pekín: “¡Yo primero!” Pero aún en medio de todo este bullicio, los jóvenes siempre encuentran un momento para mirar sus cámaras, sus portátiles y sus móviles posmodernos. Un formidable ejército de artilugios grabando desapasionadamente cada instante, cada cara y cada acción en este infierno consumista. Con un cuerpo de inteligencia de tal magnitud, ¿para qué necesita el Estado servicios secretos? Con sus frenéticas oleadas de gente, las calles de las ciudades más ricas de China son ahora más uniformes que nunca. También hay muchos mas eslóganes, solo que ahora están escritos en el agresivo lenguaje de las agencias publicitarias, diseñados para entrar en el lóbulo frontal y empezar a susurrar sobre necesidades insatisfechas. ¡Ama más!, desde luego.

(AP Photo)

La pesadilla de Orwell
La economía china ha crecido durante los últimos treinta años. Los obstáculos se fueron quedando por el camino uno tras otro. El periodo de crecimiento ha sido tan rápido que sólo Estados Unidos se mantiene por delante del creciente kraken. Y ni siquiera los EEUU podrán aguantar mucho más. Durante treinta años, el crecimiento económico arrasó con todo lo que encontró en su camino, aprovechado hábilmente todas las ventajas ofrecidas por el comunismo totalitario. Los jefes del Partido se han acostumbrado a hacerse pasar por absolutistas ilustrados, pero hace mucho que se convirtieron en meros ejecutivos de esa madre de todas las corporaciones llamada República Popular de China.

En semejante entorno, los derechos de los trabajadores y los estándares medioambientales son como mucho temas de tercera categoría. Las masas humanas y lo que queda de naturaleza están completamente subordinadas al crecimiento, que puede ser visto tanto como una secta o como un trastorno obsesivo compulsivo. Puede que el futuro empiece ahora, pero también es indescriptiblemente aterrador. Especialmente cuando las seductoras empleadas femeninas del Centro de Planificación Urbana de Shanghai, capital del futuro, te muestran proyecciones en 3D de cómo será la ciudad dentro de pocos años. En este espectáculo de ciencia ficción se pueden observar todo tipo de detalles. Pero sólo faltan las personas. Pero, ¿para qué ser mezquino? El deus ex machina reinante tiene un plan claro: el ciudadano del futuro es alguien que no siente dolor, alguien que ha sido socialmente diseñado para perder tanto sus reflejos como su capacidad de reflexión.

Mientras reflexiono sobre esto, las trabajadoras invocan frases cuidadosamente seleccionadas. El futuro. Ahora. Armonía. Una ciudad mejor. Una vida mejor. La ciudad digital. Felicidad. Esta es la lengua de nuestro tiempo, y por ahora no tiene oponente. Tanto, de hecho, que quizás la Corporación sienta pronto la necesidad de crear un enemigo lo suficientemente débil. Parece que 1984 se ha retrasado unas tres décadas, pero aún así se avecina. La música clásica de mal gusto que acompaña esta presentación futurista no podría ser más apropiada para lo que es claramente una pesadilla orwelliana a la vuelta de la esquina.

Pase de modelos de moda china (AP Photo)

El fin de la Historia 2.
Las llamadas democracias occidentales ya no están en posición de dar órdenes ni lecciones a China, mucho menos sobre derechos humanos. El partido comunista ha conseguido poner en marcha la corporación más grande de todas, a sí mismo. De hecho, esta ultra-corporación es tan poderosa que puede permitirse reflexionar sobre sí misma e incluso alguna crítica templada. Sin embargo, esta crítica se limita a asuntos económicos. Como dijo el macroeconomista del Partido Zhao Heng, “sólo cuando hayamos resuelto las cuestiones económicas estaremos preparados para afrontar los temas políticos”. Sonó como un anticipo del XVIII congreso del Partido. En él, los dirigentes tendrán que decidir si frenar a las fuerzas del capital privado que, mediante su eficiencia y saber hacer, han comenzado a invadir la Corporación estatal misma. La otra opción de los cabecillas del partido es dejar a un lado lo poco que les queda de comunismo y someterse completamente al libre mercado. No lo tienen fácil: corren un riesgo enorme de cualquier forma.

Nuestra fuente diplomática, que ha trabajado en Rusia, Ucrania, y la República Democrática del Congo, opina que el Partido aún no está preparado para ceder el control. Supondría un golpe demasiado grave a la estabilidad y sin duda desencadenaría una ola de malestar social. Ya están teniendo lugar huelgas y protestas en toda China. La semana anterior a nuestra visita, diez mil policías reprimieron brutalmente una protesta de trabajadores industriales en el centro del país, donde se ensambla el último modelo del Iphone. ¿La razón? Apple argumenta que por unas “políticas fiscales poco favorables” y a una mano de obra cada vez más cara, la compañía occidental ha decidido trasladar su operación a Vietnam y a Tailandia. Siempre hay alguien más pobre y más débil al que explotar. Y así el miedo a perder clientes occidentales es una de las razones por las que las numerosas huelgas y protestas que están teniendo lugar en China no tienen apenas difusión, tanto aquí como en el extranjero.

(AP Photo)

Escuchando atentamente lo que decía el economista del partido Heng, pude discernir algunas de las otras razones detrás del juego de fuerzas del Partido. “Parece que estamos sanos”, me dijo, “pero tenemos problemas que, si dejamos sin resolver, pueden resultar muy perjudiciales para nuestro bienestar. Desde hace un tiempo, nuestro crecimiento económico se viene reduciendo. Los indicadores económicos no son tan robustos como antes. Este año, el PIB aumentará un 7,6%. Para que la economía crezca de una forma que garantice suficientes empleos nuevos, deberíamos estar creciendo al 8%. Hemos dejado atrás los tiempos de crecimiento de dos dígitos. El mayor riesgo para la bajada de crecimiento es la inestabilidad social y, como consecuencia, el malestar social. Esto debe evitarse a toda costa. Por supuesto, es algo de lo que todo el mundo debe preocuparse, no sólo China. Nuestro objetivo es ofrecer diez millones de empleos nuevos cada año. En los últimos años, este objetivo no ha sido del todo posible. Si el crecimiento baja del 7 por ciento, será necesario hacer despidos masivos”.

A Zhao Heng no le gustan los tópicos. Este tipo de sinceridad es un fenómeno completamente nuevo en China, pero no deberíamos ser demasiado optimistas. Es un mero signo de la omnipotencia del Partido, del dominio incontestado que tiene sobre cada aspecto de la sociedad china. Para mí, el Dr. Heng da la sensación de ser el portavoz ideal para el tipo de fuerza bruta que puede permitirse ocasionalmente mostrar alguna debilidad  por razones puramente estratégicas, por supuesto.

“Los treinta años de crecimiento económico pronunciado también causaron muchos daños colaterales”, continuó. “Hemos visto un aumento brusco en la diferencia entre ricos y pobres. La mayor parte de la riqueza está ahora en manos del 20% de la población. La clase trabajadora gana, y gasta, muy poco. Los pobres tratan de ahorrar algo de dinero desesperadamente. Tienen miedo a que pronto se vean obligados a ocuparse de sus propias pensiones y sanidad, por no hablar de la educación de sus hijos. Los ricos, por otro lado, tampoco gastan mucho. Al fin y al cabo, la mayor parte de sus necesidades ya han sido cubiertas. Además, la población china está envejeciendo rápidamente. Dentro de no mucho, los problemas para tener un sistema de pensiones sostenible no serán menos graves que los de Europa”.

El Dr. Zhang me dio la sensación de saltar constantemente entre los principios básicos del neoliberalismo y la social democracia. Por otra parte, no se hace ilusiones sobre la viabilidad actual y futura del modelo Europeo del Estado del bienestar. Al fin y al cabo, al enfrentarse a su primera crisis de identidad seria, la mayor parte de Europa ha cambiado de bando rápidamente y se ha embarcado en el tipo de orgía neoliberal de la que nunca se recuperará completamente.

“Los problemas causados por el progreso sólo pueden ser resueltos con el progreso”
Así que, ¿está el Partido por fin preparado para abrir la puerta al capital privado? ¿Prepara el XVIII Congreso una gran sorpresa? ¿Está China preparada para añadir S.A  a su invencible nombre?

(AP Photo)

Unas veces, el Sr. Heng sonaba como un profeta; otras, como Jeffrey Sachs –cerebro detrás de la doctrina del shock- a principios de los noventa. “La escala de los incentivos que el Estado dio a la economía redujo enormemente las oportunidades de los inversores privados”, dijo. “Las compañías privadas no siempre lo tienen fácil para conseguir créditos. En el campo, los precios de los inmuebles están bajando, pero en las ciudades siguen subiendo. El Estado está vendiendo sus tierras; en algunos lugares, se ve obligado a venderlas a mitad de precio. Por otra parte, la venta de tierras estatales aporta casi la mitad de todo el presupuesto local. En conjunto, los negocios con tierras han demostrado ser muy rentables para el Estado. De esta forma, el papel de nuestro gobierno se ha reforzado, y el poder de los mercados se ha reducido. Nuestras exportaciones también tienen dificultades. El conservadurismo económico está en auge. El modelo económico actual de China no tiene ninguna posibilidad real de sobrevivir. Sólo llevaría a un aumento de los precios, así como al malestar social y a una contaminación sin restricciones. La reforma inevitable es la clave, pero está claro que esa reforma va a molestar a mucha gente. El progreso siempre trae sus propios problemas, el tipo de problemas que sólo pueden ser resueltos con más progreso. En cuanto se haya implementado la reforma económica, la reforma política seguirá sin duda. Por encima de todo, debemos aumentar nuestro consumo interno y asegurarnos de que podemos sobrevivir por nosotros mismos”.

En una pequeña ciudad del centro de China, en una meseta encima de Bin Xian, las autoridades locales plantaron unos cuantos huertos y trajeron a unos 7.000 campesinos de los pueblos cercanos. Todo esto ocurrió dentro del contexto del “proyecto de reconstrucción del campo”, que es parte de un programa llamado oficialmente “Luchando contra la pobreza”. Esto nos fue explicado exhaustivamente en una lúgubre sala de reuniones por un trío de miembros locales del Partido. Ya que la rápida urbanización de China contribuyó en gran medida a empobrecer el campo, donde aún viven dos tercios de la población, pregunté al político cómo había afectado a su comunidad local el éxodo a las grandes ciudades. Tras intercambiar miradas silenciosas, el líder gritó la cifra: “¡5.600!”. Tras indagar un poco más, supe que ese era el número de personas que habían dejado los pueblos cercanos en los últimos años.

Se nos llevó a hacer un tour por uno de los pueblos, aparentemente el centro de la lucha local contra la pobreza. La arquitectura me resultó extrañamente parecida al estilo colonial sudamericano, sólo que con unos cuantos barrotes más en las ventanas. Otra cosa que me llamó la atención fue el considerable esfuerzo que se había llevado a cabo para que las casas nuevas parecieran aún más antiguas que aquellas a las que reemplazaban. Me recordó a las famosas palabras del general montenegrino Slobodan Praljak durante la destrucción de Dubrovnik en 1991: “Reconstruiremos Dubrovnik, lo haremos aún más bonito y más antiguo de lo que era”.

(Una escena del tráfico en Beijing, China (AP Photo/Robert F. Bukaty)

El pueblo, un parque de atracciones al estilo del Show de Truman, estaba prácticamente desierto. También los campos cercanos, y los huertos con sus inusuales manzanas rosas. Sólo se nos permitió entrar en una de las “unidades residenciales”. El pasillo estaba decorado con un busto de plástico de Mao, algunas flores de plástico, una radio de plástico y una fotografía (en un marco de plástico) de una pareja joven de aspecto extraordinariamente feliz. Dudé mucho que el dormitorio, donde la humedad había hecho que se desconchara la mayor parte del yeso, hubiera visto muchas escenas de felicidad conyugal. La cama era doble, pero de estilo militar, y había tenido tan poco uso que unas cuantas arañas habían tejido sus redes encima de las sábanas. Sin embargo, en esta casa fantasma, se nos alentó enérgicamente a fotografiar el bodegón totalitario formado por un ordenado montón de manzanas rosas y unos cuantos tallos de maíz.

-“¿Dónde están los habitantes de esta casa?”, pregunté a nuestro guía turístico designado por el Partido: “¿Trabajando en el campo quizás?”
-“Están en casa”,espetó. “Están descansando”.

Pero no había nadie a la vista. Eso fue lo que más me sorprendió de mi visita al campo chino. El vacío. El silencio atronador. Lo que los planificadores de enormes proyectos en Pekín suelen llamar daños colaterales. Entonces los burócratas europeos, siempre tan preocupados por los derechos humanos, tuercen el gesto, escriben sus informes, y todo se olvida.
El espectáculo debe continuar.

Sin embarg,o las imágenes de deshumanización no remitían ni al volver al turbio valle. La ciudad de Bin Xian, con una población actual de 350.000 personas, se está expandiendo a propósito. En las grandes ciudades no hay más sitio para recién llegados del campo. Además, la industria en ciudades como Pekín y Shanghai se ha vuelto demasiado cara, así  que las autoridades la están trasladando rápidamente al campo.

(AP Photo)

Esta segregación económica interna es la causa de un desarrollo realmente extraño. Mientras a las afueras de Bin Xian se ha construido un parque de 5 kilómetros abarrotado de monumentos baratos, el centro de la ciudad está lleno de prostitutas muy jóvenes y tiendas de de bebidas alcohólicas de importación. Por la tarde, no paraban de llegar al hotel futurista donde estábamos alojados coches terriblemente caros, habitados por recién llegados emprendedores chinos. La mayoría llevaban “acompañante”. Las habitaciones aquí ofrecían a sus huéspedes una impresionante selección de juguetes sexuales de alta gama. Los miembros de nuestra pequeña expedición nos preguntábamos que era exactamente lo que el Partido trataba de comunicarnos llevándonos allí a pasar la noche. ¿Amar más?

Para concluir esta etapa de la gran producción teatral llamada nuestra visita guiada a China, nuestros guardaespaldas nos llevaron a ver un enorme edificio moderno que servía tanto de orfanato como de residencia para mayores. Pero incluso este sitio estaba prácticamente desierto. Unos cuantos ancianos, con la cara tan morena que parecía que acababan de venir de una semana arando en el campo, jugaban a las cartas con una baraja completamente nueva y nos sonreían como si fuéramos una delegación de jovencitas ligeras de ropa venida para llevarles directos al paraíso. Como debe ser en un edificio fantasma en un pueblo fantasma, el resto de habitaciones estaban habitadas sólo por el silencio.

Me quedé mucho rato mirando a los miles de guerreros de terracota excavados hace unos cuarenta años en los alrededores de Xian. Esta antigua capital de la región es ahora una de las ciudades que más crecen de China. Un hormiguero gris e indescriptiblemente contaminado donde miles de torres idénticas y sin alma aparecen setas después de la lluvia. Incluso aquí, en las provincias, el futuro comienza ahora.

El Partido, la Corporación, tiene ahora a sus propios guerreros de terracota. Hordas y hordas y hordas de mano de obra barata dando lugar a lo que los políticos se apresuran en denominar un éxito. Estas nuevas legiones de terracota son las mejores tropas de choque de la Corporación en el campo de batalla global, tanto en sentido económico como político. Añade un nuevo portaviones o diez para aumentar la seguridad, y desde luego que el futuro empieza ahora.

Bostjam Videmsek es autor del libro 21st Century Conflicts: Remnants of War(s).

 

http://periodismohumano.com/economia/china-s-a.html

United Explanations | Esto es lo que pasa si tiramos la basura al mar. Años y años para que se degrade. Hay otras salidas a nuestros residuos, cuidemos el medio ambiente.

Foto: Conspiracy Syndrome

De armas tomar

Publicado: septiembre 24, 2012 en REFLEXIONES

Lo que nos cuesta la guerra

 

Véanla completa en http://bit.ly/NLbWln

Por: Javier Valenzuela | 19 de septiembre de 2012

Portada EPS Salman RushdieA Salman Rushdie le sigue funcionando bien la cabeza pese a la pesadilla en la que vive desde que, un día de febrero de 1989, el ayatolá Jomeini le condenara a muerte en una infame y famosa fatwa. En unas declaraciones a NBC,recogidas en EL PAÍS por Walter Oppemheimer, el escritor afirma: “Uno de los problemas de defender la libertad de expresión es que a menudo tienes que defender a gente que, en última instancia, encuentras ofensiva, desagradable y asquerosa”.

Rushdie alude de esta guisa a los autores de La inocencia de los musulmanes, el vídeo sobre Mahoma que ha provocado violentísimas reacciones de esos hooligans del islam suní fundamentalista que son los salafistas. A Rushdie ese bodrio no solo no le gusta nada, sino que, además, lo considera “provocador” y “malintencionado”.

Pero esto es lo que tiene la libertad de expresión; si uno cree en ella, debe  vivir de acuerdo con aquella vieja máxima: “No me gustan tus ideas, pero daría mi vida para que puedas expresarlas”. O se es liberal en el buen viejo sentido de la palabra, o sea, partidario de la libertad en todos los aspectos de la vida individual y colectiva, o se es otra cosa (por ejemplo, eso que está de moda en la derecha contemporánea, lo de, como Esperanza Aguirre, ser ultraliberal en lo económico -defensa a ultranza del capitalismo- y mazo rancio en lo político, social, mediático, cultural y moral).

Algo tan antiguo, tan medieval, tan bíblico -y del Antiguo Testamento- como la blasfemia, no puede ser considerado delito en ningún país que se pretenda mínimamente civilizado y democrático. Otra cosa es que determinados dardos a tal o cual religión sean de mal o dudoso gusto. La inocencia de los musulmanes es de muy mal gusto, pero hay que ser muy bestia para usarlo como pretexto para matar a gente.

     Los versos satánicosla novela por la que Jomeini condenó a muerte a Rushdie, no pertenece en absoluto a la categoría de obras denigratorias de una religión y sus creyentes. Al contrario, el pobre Rushdie, nacido en una familia musulmana de Mumbai (India), creía hacer con esa obra una aportación a la espiritualidad islámica. Pero, probablemente sin leerla, que es como nacen estas campañas de estigmatización, Jomeini y los suyos se rasgaron las vestiduras por el hecho de que Rushdie incorporara como personaje de su novela al profeta Mahoma.

Charlie-Hebdo     Una más que milenaria tradición musulmana establece que Mahoma (cuyo nombre estaría mejor transcrito al castellano como Muhamad) no puede ser representado de ninguna manera (si aparece en alguna obra figurativa es, siempre, con el rostro cubierto por un velo), y mucho menos satirizado, ridiculizado o, ya no digamos, mancillado.

En la era de la información global, cuando todo el mundo sabe de inmediato lo que hacen los demás, este tabú se ha convertido en explosivo. Recuérdese la violencia que desataron en sectores fundamentalistas musulmanes las caricaturas del profeta publicadas en un periódico danés. Y síganse ahora los disturbios y asesinatos que está provocando el filme sobre Mahoma.

Por eso, las autoridades francesas no las tienen todas consigo ante la decisión del semanario satírico Charlie Hebdo de publicar hoy unas caricaturas de Mahoma. Pese a las súplicas de su Gobierno para que no se arrojara más leña al fuego, los directivos de Charlie Hebdo han tirado para adelante invocando la libertad de expresión. Y tienen razón: no hay ningún motivo en una sociedad democrática para que no pueda abordarse de modo humorístico tal o cual personaje considerado sagrado por una u otra religión. Si se acepta en esta materia algún tipo de autocensura, podemos terminar regresando a tiempos inquisitoriales (que es, por cierto, lo que desean algunos en todas y cada una de las religiones del Libro).

Caricatura-Mahoma-Charlie-HebdoEn todo caso, las caricaturas de Mahoma no van en la portada de Charlie Hebdo. Ésta representa a un judío ultraortodoxo que lleva a un musulmán en silla de ruedas, una alusión explícita al divertido filme francés Intouchables. Las imagenes de Mahoma salen en el interior y abordadas con un humor relativamente «blanco» para lo habitual en esa publicación: en una aparece lloroso por su participación en una “película lamentable” y en otra, eso sí, con la espalda completamente desnuda mientras es filmado.  Nada, en todo caso, por lo que quepa desencadenar un apocalíptico llanto y crujir de dientes.

Las autoridades francesas se temen, sin embargo, lo peor, y hacen bien dados los antecedentes de los salafistas suníes y los jomeinistas chiíes. Embajadas, consulados y liceos franceses en países árabes y musulmanes han sido colocados en estado de máxima alerta, según informa Miguel Mora desde París.

Mal que les pese a los adictos a las teorías conspirativas, las coincidencias existen. Y lo es que el regreso a la actualidad de Salman Rushdie se produzca cuando hay liada una gorda con la película sobre Mahoma y lo que puede venir con la caricatura de Charlie Hebdo. Rushdie, con el que EL PAÍS SEMANAL publicará el domingo una amplia entrevista, acaba de sacar sus memorias de los nueve años en que, tras la fatwa de Jomeini, tuvo que vivir clandestinamente y bajo la protección de los servicios de seguridad británicos (el escritor tiene esa nacionalidad).

Joseph_Anton_RushdieEl libro se llama Joseph Anton. Cuando empezaron a protegerle, los servicios de seguridad le pidieron que escogiera un seudónimo para ocultar su identidad. Él optó por éste: Joseph por Joseph Conrad y Anton por Anton Chejov, dos de sus autores favoritos.

Lo más fascinante y terrible de estas memorias es cómo Rushdie tuvo que arrostrar una vida secreta bajo amparo oficial semejante a la de los testigos protegidos que declaran contra la Mafia: cambios constantes de domicilio; movimientos furtivos, siempre rodeado de gigantes armados; maniobras para despistar a eventuales seguidores; reuniones a escondidas con su hijo; entrada en cines cuando las luces ya se han apagado y salida antes de que vuelvan a encenderse…

Rushdie cuenta cómo comenzó deseando poder explicarles a esa mayoría de buena gente que practica el islam que su libro, Los Versos Satánicos, no era lo que sus detractores fundamentalistas decían que era, pero que, al final, arrojó la toalla. Entonces, comprendió una cosa esencial: que los gobernantes de los países democráticos estaban obligados a «defender su derecho a ser conflictivo (troublemaker)”.  Tenía, tiene razón.

 

http://blogs.elpais.com/cronica-negra/2012/09/rushdie-charlie-hebdo-y-el-derecho-a-ser-conflictivo.html

desapareciendo

Publicado: septiembre 12, 2012 en GéNERO, REFLEXIONES

 

Composición fotográfica de la yemení Bushra Almutawakel en la que simboliza la desaparición de la mujer bajo el fundamentalismo religioso musulmán.

Foto: Global Voices

Canarias Semanal
Los partidos de izquierda que se ponen a «congelar» durante 50 años simplemente desaparecen
Según Samir Amin hemos entrado en una nueva fase del capitalismo. Cree que se trata de una etapa cualitativamente nueva. El sistema capitalista no solo está en crisis, -mantiene Amin- sino que lo que se está produciendo en él una autentica implosión, pero que no es el efecto de la lucha popular.Samir Amín es uno de los pensadores marxistas más importantes de su generación. Nacido en El Cairo, pasó su infancia y juventud en Port Said. Fue allí donde asistió a la escuela secundaria. De 1947 a 1957 estudió en París, obteniendo un diploma en Ciencias Políticas antes de graduarse en estadística (1956) y economía (1957). En su autobiografía Itinéraire intellectuel confesó que su vida militante solo le permitía dedicar un mínimo de tiempo a su preparación para los exámenes universitarios. En efecto, a su llegada a Paris, Amin se unió prontamente al Partido Comunista Francés. Sin embargo, terminaría alejándose de esta organización para aproximarse a los círculos de pensamiento maoísta

Samir Amin es autor de una voluminosa obra de análisis crítico del capitalismo y de sus crisis. Durante una reciente visita a Ecuador de este notable pensador marxista, Irene León, de la organización FEDAEPS, le realizó una entrevista. De ella hemos tratado de resumir las ideas que nos han parecido más significativas.

Según Samir Amin hemos entrado en una nueva fase del capitalismo. Cree que se trata de una etapa cualitativamente nueva, caracterizada por la extraordinaria centralización del capital, llegando a tal punto que, hoy en día, el capital monopólico lo controla absolutamente todo.

Se trata de un relevante cambio cualitativo que él le adjudica la calificación de «monopolio generalizado», es decir, que extiende sus tentaculos a todas las esferas.

Esta característica provoca consecuencias importantísimas . «En primer lugar -dice Samir Amin- se ha desvirtuado completamente la democracia burguesa, pues si antes se fundamentaba en una oposición izquierda-derecha, que correspondía a alianzas sociales, más o menos populares, más o menos burguesas, pero diferenciadas por sus concepciones de la política económica, en la actualidad, en Estados Unidos, por ejemplo, republicanos y demócratas, o en Francia socialistas de la corriente de Hollande y la derecha de Sarkozy,

Samin cree que el sistema capitalista no solo está en crisis, sino que lo que se está produciendo es una autentica implosión del sistema mismo… Es decir, el sistema no está siendo capaz de reproducirse desde sus propias bases. O dicho de otra forma, está siendo víctima de sus propias contradicciones internas.

Por otra parte, Samir Amin cree que a diferencia de lo que ocurría en el pasado, las fuerzas reaccionarias dominantes -el capital monopólico- está concentrado en una triada imperialista constituida por Estados Unidos-Europa-Japón. A esta tríada se suman todas las fuerzas reaccionarias alrededor del mundo que se agrupan, de una forma u otra, en bloques hegemónicos locales. De acuerdo con la opinión de Samir Amin, estas fuerzas reaccionarias locales son extremadamente numerosas y difieren enormemente de un país al otro.

«La estrategia política de las fuerzas dominantes,-Estados Unidos-Europa-Japón- está definida por su identificación del enemigo. Para ellos, el enemigo son los países emergentes, es decir, China. El resto, como India, Brasil y otros, son para ellos semi-emergentes».

UN SISTEMA QUE IMPLOSIONA PERO CON UNA DÉBIL RÉPLICA POPULAR

Para Samir Amin, el sistema capitalista no está implosionando como consecuencia del ataque organizado de los pueblos, sino que paradójicamente su destrucción está siendo una consecuencia de su propio éxito. «Desgraciadamente, -puntualiza Samir Amin- si examinamos los movimientos de nuestros pueblos en la actualidad, su grado de conciencia sobre la naturaleza del sistema y, particularmente, sobre la implosión es aún muy débil y muy limitado. Se circunscribe a la izquierda histórica de tradición marxista, mientras la mayoría, al cabo de reiteradas capitulaciones frente al neoliberalismo, no se cuestiona, ni problematiza el asunto de fondo».

Y Amin hace una puntualización histórica: «Los momentos revolucionarios son raros y cortos a lo largo de la historia, y si en esos momentos, hay iniciativas audaces, estas ganan terreno y se abren paso muy rápidamente. No me molesta escuchar que en la actualidad, los comunistas en Ecuador o en Egipto, son una pequeña minoría y en casos no logran nada en las elecciones generales y demás. Si tienen audacia, y no solamente una audacia retórica, si emprenden acciones, eso se convierte rápidamente en una bola de nieve».

Para constatarlo, explica Samir Amin, basta examinar la historia de los partidos comunistas que han llegado al poder. Alcanzaron el poder en muy corto tiempo. El Partido Bolchevique se constituyó formalmente en 1897. En 1905, siete años después, hubo una primera revolución y siete años después, vino la segunda. No pasaron ni siquiera veinte años.

«Cuando el Partido Comunista Chino, se reunía en Shanghái, con Mao y otros, eran apenas una veintena, muy pocos para un país de la dimensión de China. Seis meses después, fueron varios centenares y unos años después, ya encabezaban un pequeño ejército local de liberación. Similares características tuvo la Revolución Cubana, liderada por Fidel Castro».

Samir Amin cree que históricamente las victorias revolucionarias han sido o rápidas o inexistentes. «El hecho es que los partidos de izquierda que se ponen a congelar, durante cincuenta años, esperando el «momento indicado», simplemente se congelan y ahí termina su historia».

Fuente: http://canarias-semanal.com/not/4432/el_capitalismo_implosiona__pero_no_bajo_los_efectos_de_la_movilizacion_popular_/

http://www.rebelion.org/noticia.php?id=155770&titular=samir-amin:-%22el-capitalismo-implosiona-pero-no-bajo-los-efectos-de-la-movilizaci%F3n-popular%22-

Por: Chema Caballero | 06 de septiembre de 2012

Ahora solo se ven camisetas del Real Madrid. ¡Cómo han cambiado las cosas en muy poco tiempo!. A lo mejor soy un poco exagerado y parcial, pero hace seis meses solo se veían del Barça, ahora es distinto, las de este equipo han quedado relegadas a segundo plano, se ven viejas, o se han pasado a los hermanos menores. En este momento, lo más es tener una del Madrid, o de la selección española.

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Es así como cambian las fidelidades entre los jóvenes, a ritmo del último campeón de liga. El fútbol es algo que siempre está presente en las conversaciones con los adolescentes, como en tantas otras partes de África. Aquí también son muchos los que sueñan con ser futbolistas famosos y ganar mucho dinero para tener mujeres y coches. Un deseo que se repite en tantas partes y que empuja a muchos a vivir en continua frustración pensando en lo que no tienen.

Es el caso de Paul que tuvo la suerte de ser uno de los elegidos para representar a su diócesis durante la Jornada Mundial de la Juventud de 2011, en Madrid. Estuvo en Huelva y en la capital. Recuerda que todo era gratis y estaba muy bien organizado. Me dice que es fácil vivir en un país como España donde el gobierno se preocupa de que no te falte nada. Comenta que, evidentemente, un país como el suyo nunca podría organizar algo parecido, porque no tienen dinero para dar de comer a tanta gente.

Paul está a la espera de los resultados de la prueba de acceso a la universidad. Mientras, pasea en su bicicleta y de vez en cuando echa una mano en los campos de la familia, donde ahora están preparando la tierra para plantar el mijo. Su hermano mayor ya está en la universidad, estudia historia en Nigeria y se espera que llegue uno de estos días para pasar las vacaciones.

Cuando le pregunto por qué no estudia en la universidad de Yamena, incluso en la que existe en Bongor, ya que resultaría más barato que estudiar en otro país, me contesta que en Chad la universidad no es seria y que hay huelgas continuamente, los profesores no van a clase… Además, me dice, si no eres del norte lo tienes muy difícil, no conseguirás becas y te será casi imposible aprobar.

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Clases de apoyo a estudiantes en Bongor.

En el tiempo que llevo aquí no he conseguido visitar el campus de la Universidad de Bongor. Los estudiantes llevan meses en huelga y el recinto aparece fuertemente custodiado por la policía y el ejército. Los huelguistas protestan porque se ha impuesto un profesor proveniente del norte que casi no habla francés, solo árabe. Dicen que es parte del plan del gobierno para arabizar e islamizar todo el país. Más de una vez hemos oído los disparos del ejército intentando dispersar a los estudiantes. Los últimos días que estoy en Bongor, las cosas parecen irse de las manos: por fin el rector ha destituido al profesor y este se despide insultando a los alumnos llamándoles ignorantes y “gente del sur”. Esto ha encendido los ánimos y se han producido ruptura de cristales y manifestaciones. El ejército ha vuelto a disparar. Algunos alumnos y profesores, proveniente del norte, se han puesto de parte del profesor destituido y este se ha envalentonado incrementando sus insultos. Ha tenido que intervenir el gobernador de la región, el cual ha tomado la decisión de cerrar la universidad. No se sabe qué pasará con los exámenes finales.

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Todo esto es reflejo de la gran división que vive el país: Norte-Sur, islam-religiones tradicionales/cristianos. La desconfianza, el miedo, el recelo, los rumores, los tópicos…, están presentes en toda conversación. Parece que el conflicto, la pelea, va a surgir en cualquier instante.

En medio a esta situación me encuentro a un canario de la isla de La Palma,Jesús Calero, joven Misionero Javeriano, que lleva seis años en la zona. Habla perfectamente el árabe, el francés y el massa. Trabaja principalmente con los jóvenes intentando romper las barreras que separan a unos y a otros y forjar unidad entre los provenientes de distintos grupos, regiones o religiones. Se le ve por todas partes, a pie o en moto, saludando, hablando, comentando… Utiliza principalmente el deporte para acercarse a ellos. A través del fútbol entra en contacto con los jóvenes, los conoce y hace que se conozcan, que hablan entre ellos, que rompan las barreras que les separan.

Luego, les ayuda a estudiar, con la idea de que solo la educación de los jóvenes hará posible que las cosas cambien poco a poco. Tiene una biblioteca donde tanto estudiantes como profesores pueden tomar libros prestados. Muchos acuden a por los libros de texto, que no pueden comprar, y así tienen la oportunidad de estudiar. También organiza clases de apoyo que suplan las deficiencias de las escuelas y liceos. Algo muy importante, este pequeño proyecto está ayudando a que muchas niñas puedan acceder a la educación secundaria.

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El Padre Jesús Calero, Misionero Javeriano en Bongor.

Es una pequeña gota de agua en un inmenso océano, pero no se rinde y sigue adelante, con la esperanza de que las cosas cambien algún día. Casi no cuenta con ayuda proveniente de fuera, por eso le es tan difícil continuar con sus proyectos, como el que tienen ahora entre manos: la construcción de un centro deportivo-cultural donde reunir a los jóvenes y organizar las actividades deportivas  y culturales que le ayuden a trabajar con ellos.

Cuenta que le da miedo el alto nivel de alcoholismo que se detecta entre los jóvenes. Puede ser fruto de la frustración que estos acumulan: ven el mundo que hay fuera de su país, las posibilidades que existen y ellos no pueden lograrlas.

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Boule y salsa.

Paul comenta que, como a todo el mundo, a él también le gustaría ir a vivir a Europa. Ha oído hablar de la crisis económica pero piensa que las cosas seguirán todavía siendo mejor allí que en Bongor.

Evitar esta migración y facilitar que los jóvenes educados sean parte del cambio que necesita el país es también uno de los objetivos del Padre Jesús Calero.

Todo esto lo hablamos sentados bajo un gran árbol fuera de la concesión(casa) donde Paul vive con sus padres y hermanos: varias habitaciones y una cocina alrededor del granero. Nos ha invitado a comer. Evidentemente, la comida que nos trae una de sus hermanas es boule de mijo con salsa de pescado seco e hierbas. El manjar que se come todos los días.

Charlamos sin prisas, como parece que se hace casi todo en este país, esperando que la brisa sople y el ambiente se refresque un poco.

TODAS LAS FOTOS, CHEMA CABALLERO

http://blogs.elpais.com/africa-no-es-un-pais/2012/09/viaje-a-chad-9-jovenes-futbol-y-boule.html

¿Borrón y cuenta nueva en Somalia?

Publicado: agosto 23, 2012 en REFLEXIONES

Por: Jesús A. Núñez | 22 de agosto de 2012

Si por algo ha asomado momentáneamente Somalia a los medios durante estos días ha sido por la noticia de la infortunada muerte de la atleta Samia Yusuf Omar, en su intento por llegar en patera a Italia durante este verano. Un caso como este nos basta para hacernos a la idea de cuáles deben ser las condiciones de vida en ese conflictivo país para que Samia, una campeona continental de los 100m, se arriesgara a una aventura de tal calibre, con el frustrado objetivo de proseguir su carrera deportiva.

Igual que cabe suponer que la inmensa mayoría de los nueve millones de somalíes ni se han enterado de esta muerte, es fácil apostar a que tampoco saben que desde el día 20 de agosto su país ha iniciado formalmente una nueva etapa. Y no lo saben porque tienen en sus cabezas otras preocupaciones más inmediatas- ligadas a la pura supervivencia y a la falta de seguridad para sus vidas.

Sea como sea, la comunidad internacional ha decretado pomposamente el fin del periodo transitorio iniciado hace ahora ocho años (a falta de que el Consejo de Seguridad de la ONU lo confirme el próximo día 28), con la eliminación del Gobierno Federal Transitorio. Cuando se toma en consideración el hecho de que Somalia acumula ya más de veinte años de subdesarrollo, violencia y caos, el balance de este periodo no puede ser en ningún caso positivo. Y eso aunque haya que reconocer que se ha conseguido una cierta mejora de la seguridad en este último año, en la medida en que se ha logrado reducir la capacidad operativa del grupo Al Sahbaab, tanto en la capital como en algunas zonas del país.

Pero mirando al futuro son tantas las asignaturas pendientes y tantos los retos a los que se enfrenta la población somalí que resulta muy aventurado suponer que será posible hacer borrón y cuenta nueva para convertir a Somalia en un Estado federal en el que tengan acomodo sus diversos actores (con Puntlandia y Somaliland como elementos más delicados) y en el que sea posible cubrir las necesidades básicas del conjunto de la población en un entorno de seguridad aceptable.

De momento la agenda conocida establece la necesidad de aprobar una nueva Constitución- acordada inicialmente el pasado día 1-, elegir un nuevo parlamento- en un proceso todavía inconcluso para seleccionar (no elegir) provisionalmente a 275 representantes en la Cámara baja y a 54 en la Cámara Alta-, elegir un nuevo presidente del parlamento y un nuevo presidente del país- por decisión del parlamento entre los 35 candidatos ya registrados, con el saliente Sharif Sheikh Ahmed y el saliente primer ministro Abdiweli Mohamed Ali como favoritos. Todo esto debe llevar a la designación de un nuevo gobierno, que junto al parlamento provisional debe convalidar la Constitución para que sea sometida posteriormente a referéndum nacional y a nuevas elecciones (todo ello en el horizonte de 2016).

Como bien puede deducirse a simple vista, se trata de un complejo proceso a desarrollar en un territorio fragmentado, con varios focos de conflicto todavía abiertos (de hecho, el primer objetivo de las nuevas autoridades será lograr un control efectivo más allá de Mogadiscio) y con las escasas fuerzas en manos de quienes ahora apuesten por consolidar este nuevo periodo. Es por eso por lo que resultará vital contar con la implicación de la comunidad internacional, en un difícil equilibrio para evitar injerencias internas (recordemos que, además de la Unión Africana con AMISOM, Etiopia y Kenia tienen actualmente tropas desplegadas en Somalia) y para acompañar el proceso con una condicionalidad que atienda a la creación de una entidad representativa de toda la población y no a los intereses particulares de cada actor externo.

La lista de tareas a realizar es interminable- desde activar una economía lastrada por la corrupción y la criminalidad organizada hasta poner en pie una administración civil y militar al servicio de la sociedad y subordinadas a un poder político no excluyente. Somalia se juega dejar de ser el prototipo de Estado fallido y los somalíes, como nos enseña el ejemplo de Samia, se juegan directamente su vida en el envite. Van a necesitar mucho más que suerte.

 

http://blogs.elpais.com/extramundi/2012/08/borr%C3%B3n-y-cuenta-nueva-en-somalia.html